Las cuadrículas y las líneas de pauta de las libretas y los cuadernos sirven para que las hojas en blanco nos atemoricen menos.
La inspiración nunca viene, hay que salir a buscarla.     
Para construir el futuro, hay que hablar de lo que hacemos ahora; hablar de lo que haremos mañana no es construir, es soñar.      
La ira es una pésima herramienta para lograr objetivo alguno; en realidad es una bomba de relojería que nos explota en las narices cuando pretendemos usarla.   
¿Sabes cómo medir el nivel de pasión por tu trabajo?. Simplemente analiza tu estado de ánimo nada más levantarte el lunes...     

La pasión no debería ser confundida con la codicia. La equivocación de muchas empresas, especialmente en sus áreas comerciales, es poner codicia donde deberían poner pasión.       
Quien vive su profesión de manera apasionada, no muere; quien no tiene la fortuna de apasionarse por su trabajo, no vive.   
Los directivos con visión no necesitan que la competencia se adelante y dé un paso, para saber cual es el camino.